Ruta 0168.- Ólvena, Artasona, Presa del Pantano del Grado, La Puebla de Castro, Ólvena

 

Ruta 0168.- Ólvena, Artusa, embalse de El Grado , Alto de San Roque, Ólvena.

El 3 de febrero de 2019, llevo en Ólvena 64 kilómetros totales con la nueva bici que estreno esta ruta,

Por su situación geográfica, Olvena se encuentra a caballo entre dos comarcas altoaragonesas de fuerte personalidad. El paisaje de su término municipal, plagado de olivos, almendros y campos de cereal, define al Somontano de Barbastro, aunque también aparece en la zona más meridional de la Ribagorza. Otra característica que comparte con ambas comarcas es su arquitectura popular, los materiales, las casas y especialmente, el trazado de sus calles, son una buena muestra del aspecto original de los pueblos de estas comarcas hasta hace pocos años. A mediados del Siglo XIX, el término de Ólvena no sólo destacaba por las cosechas de cereales, olivas y almendras sino también por la producción de seda, y gracias a su cercanía a dos importantes ríos, por la pesca de truchas, barbos y anguilas.

El nombre de Ólvena parece proceder del nombre romano de persona Ulvus o Ulvius, aunque la primera noticia que tenemos de esta población se remonta a la Edad Media, en ésta época tiene su origen un pequeño castillo o torreón cuya función era salvaguardar y vigilar el estratégico paso del Congosto. A partir de este puesto militar, las viviendas del pueblo se fueron estableciendo a su resguardo en la cercana ladera.

De aquella época se conservan, así mismo los restos de la antigua ermita del Santo Cristo, que debió de servir de capilla al antiguo castillo. Esta ermita se construyó en el siglo XII y contaba originalmente con un ábside semicircular, de estilo románico, que perdió en una reforma efectuada durante el siglo XVII. Situada a muy poca distancia de la confluencia entre los ríos pirenaicos Cinca y Ésera, esta población ocupa un lugar privilegiado ya que su término municipal incluye una importante superficie de huertas cercanas al río Cinca, así como una gran porción del Congosto formado por el río Ésera.

Hasta hace pocos años, esta garganta solo era atravesada por algunas estrechas sendas que, aunque no llegaban a recorrerlo en su totalidad contaban con la presencia de dos puentes de origen medieval llamados del Diablo y de La Sierra.

Cuenta la leyenda que el Puente del Diablo recibe este nombre porque una moza de Ólvena pactó su construcción con el demonio de tal manera que, si éste era capaz de acabarlo antes de que cantara el gallo, recibiría a cambio el alma de la doncella. El Diablo iba a poner la última piedra cuando aún no había amanecido, pero, al verlo, la moza se acercó con una luz a un gallo para que cantara antes de hora, y el diablo resultó burlado.

Subiendo al cementerio hay un magnífico mirador desde el que  se ven las cumbres del Pirineo, y a nuestros pies  el Congosto.

Salgo de Ólvena por camino asfaltado y digo bien, porque es una PR asfaltada hasta Atusa. Salgo  ascendiendo hasta  el kilómetro 1,69, y sigo descendiendo hasta el kilómetro 4,35.entonces aparecen los viñedos.

En el kilómetro 5,41, paro ante los indicadores de PR-HU-74 a La Puebla de Castro. PR-HU-76, y PR-HU-76 Artasona  y GR.17 a Torreciudad.

Yo continúo hacia Artasona llegando a esta localidad en el kilómetro  5,60.

Artasona o Artasona de Cinca es una localidad perteneciente al municipio de El Grado, en el Somontano de Barbastro, en la provincia de Huesca (Aragón). En 1845 se incorpora junto con Enate al municipio El Grado.

El casco urbano, abigarrado y compacto, cuenta con bonitas casas típicas con muros de ladrillo, piedra y tapial. Ocupando la parte más alta se encuentra la Colegiata de Santa María la Mayor.

La localidad de Artasona perteneciente al municipio de El Grado se asienta sobre una terraza fluvial, en la margen izquierda del río Cinca.

Junto al castillo se encuentra la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora, construida en estilo gótico. Al interior, la bóveda de medio cañón apuntado de la nave y los gruesos nervios de la cabecera, nos remiten a una época temprana. Ya en el siglo XVI, se remató con la característica galería de arcos de medio punto, construidos en piedra, y se erigió una nueva torre campanario sobre la cabecera.

El 20 de enero, la tradición vive junto al fuego en la Hoguera de San Fabián, cuando el pueblo se reúne el para quemar los “malos vientos” y realizar “la subasta popular” en la que se puja por objetos cedidos por las familias que suelen presentarse con apariencia engañosa.

Terminada mi visita a Artasona continúo en dirección a Torreciudad.

En el kilómetro 7,94 llego a una rotonda, donde hay una escultura en forma de seta , o es lo que a mí me parece. En esta rotonda está el desvío a La Puebla de Castro y Graus, por el alto de San Roque, y que tomaré a la vuelta de mi visita a la presa de El Grado..

En el kilómetro 8,50, llego al muro de la presa del Pantano de el Grado. Hace un viento horrible, tanto que hay oleaje. En la lejanía sobre un promontorio se eleva Torreciudad, La soberbia hecha ladrillo, para mí una construcción erigida por y para la mayor gloria personal de Escrivá de Balaguer, no creo que Dios necesite tanto ladrillo, cuando son los pobres los que si lo necesitan, y sin embargo son abandonados a su suerte.

Dejando filosofadas aparte y continuando con lo humano, el Pantano de de el Grado fue construido en 1932 en el río Ésera , cerrando su dique la foz abierta en la sierra de Carrodilla . Su cola llega hasta el pueblo de Graus , en la confluencia del Ésera y el Isábena . Tiene una superficie de embalse de 69 Ha., con un volumen de 92 Hm.3, y su presa mide 65 m. de altura. De él arranca el Canal de Aragón y Cataluña. La construcción del embalse y la presa de El Grado (concluida en 1969), marcó un importante cambio en la forma de vida y el paisaje gradense.

Ocupa una superficie de 1.273 Ha. y embalsa 400 Hm.3. Forma parte del sistema de riegos del Alto Aragón, puesto que en él se origina el canal del Cinca. También se aprovecha hidroeléctricamente mediante un salto de pie de presa

Ofrece al visitante un inmejorable espectáculo donde el azul del cielo queda perfectamente reflejado en la lámina de agua. La coronación de la presa es un lugar excelente para observar el embalse, con el santuario de Torreciudad y el Pirineo al fondo, y justo enfrente, el valle del Cinca con su característica vegetación de ribera. También desde allí el observador paciente verá saltar las truchas y otros ciprínidos.

En este enclave se celebran tradicionalmente diversas pruebas de la modalidad de orientación subacuática organizadas por la Federación Aragonesa de Actividades Subacuáticas (FARAS). Es también uno de los lugares donde se vienen realizando desde hace lustros las maniobras subacuáticas de la Sección de Actividades Anfibias (SAA) y del Regimiento de Pontoneros ubicado en Monzalbarba (Zaragoza).

La presa ofrece visitas guiadas bajo cita previa su Mail: divulgacion@chebro.es. Teléfono: 976 711 045

Terminada mi visita al pantano inicio el regreso, descendiendo hasta la rotonda  antes aludida, y en el kilómetro 9,10 tomo la carretera  A-2211, hacia La Puebla de Castro y Graus.

En el kilómetro 11,21, salgo de la Comarca del Somontano y entro en la de Ribagorza.

En el kilómetro 14, 28 llego al alto de San Roque, de 670 metros de altitud, donde se encuentra la ermita del mismo nombre y desde donde tengo una preciosa panorámica de la Puebla de Castro y el Turbón.

Una vez que he disfrutado del entorno, continúo por una pista no señalizada y que parece ser que va a Ólvena, y no me equivoqué, Lamentablemente es más frecuente comprobar que las señales PR o GR no se respetan , o son arrancadas, tiroteadas,  o dejan solo el poste, los vándalos campan a sus anchas.

En el kilómetro  17,55 la pista conecta con la carretera  que va a Ólvena.

En el kilómetro 19,23, llego a Ólvena.

Las fotografías aparecen por orden de Ruta

Serafín Martín:

Fuentes propias y:

https://es.wikipedia.org/wiki/Artasona

http://turismosomontano.es/es/que-ver-que-hacer/pueblos/artasona