Ruta 1101 Berge, Molinos, Cuevas de Cañart

Ruta 1101 por El Maestrazgo turolense.-Berge, Molinos, Cuevas de Cañart.

 

El 30 de diciembre de 2021, llevo en Berge un total de 6928 kilómetros.

 

Berge es una localidad y municipio de la provincia de Teruel, en la comunidad autónoma de Aragón, España. Tiene una población de 245 habitantes (INE 2017). Su patrona es la Virgen de la Peña. El pueblo se halla próximo al enclave formado por el Maestrazgo y la ruta del tambor y el bombo.

 

Su punto más alto corresponde al Morrón de Viñas. En su término, concretamente en el más de Ruiz, se halla un árbol monumental, en este caso un latonero o almez (celtis australis). También podemos encontrar el embalse de Gallipuén, ubicado por completo en el territorio de Berge.

 

 

Existen numerosos vestigios de antiguos pobladores (íberos, visigodos) y también restos de los tiempos en que estuvo ocupada por los árabes, de quienes, según la tradición local, proviene la actual infraestructura del regadío principal: azud, acequias. etc.

Se conocen tres ubicaciones diferentes para la población a lo largo de la historia:

 

La primera y más antigua situada en un punto de elevación media, entre la ermita actual de la Virgen de la Peña, con vestigios de haber sido un punto fortificado en la Edad Media y un desnivel natural, a lo largo del Cabezo del Molino.

En época medieval Berge perteneció a la encomienda de Calatrava, orden militar y religiosa fundada en el siglo XII y que alcanzó gran poder político y económico en todo el Bajo Aragón Histórico durante la Reconquista. Con el declive de la Orden de Calatrava, Berge pasa a pertenecer sucesivamente en la sobrecullida de Alcañiz (1488-1495), a la vereda de Alcañiz (1646) y al corregimiento de Alcañiz (1711-1833). En 1834 se constituye como Ayuntamiento, primero del partido judicial de Castellote y, a partir de 1965 de Alcañiz.

Otros núcleos de población históricos del término municipal de Berge son las masías de La Dehesa y Más de Ruiz.

La última y actual, no excede de los 500 años de antigüedad, pero en ella se observan hermosas construcciones de los siglos XVII y XVIII, época de esplendor y de aumento notable de la población, como lo demuestra la construcción de una gran iglesia.

Esta iglesia parroquial de San Pedro Mártir  1737 (siglo XVIII), es una construcción en mampostería y sillería, del siglo XVIII y estilo barroco, cuenta con tres naves de tres tramos muy anchos. La central se cubre con tres cúpulas sobre pechinas. La cabecera actúa estructuralmente como un cuarto tramo, pero de menores dimensiones, y cuenta con una serie de capillas que rodean el conjunto. La torre se sitúa a los píes y cuenta con cuatro cuerpos construidos En ladrillo. Por su decoración e influencia mudéjar, se trata del elemento más destacado del conjunto.

Ermita de la Virgen de la Peña

Cuenta la tradición popular que, sobre un peñasco, la Virgen se apareció a un pastor y que, en conmemoración del suceso, los habitantes de Berge quisieron construir una ermita en su honor, pero para evitar un emplazamiento tan abrupto, optaron inicialmente por construir el templo a los pies de la montaña. La leyenda cuenta que al día siguiente la imagen de la Virgen volvió al sitio de su aparición, donde finalmente se construyó la ermita actual.

En lo que se refiere al templo, la ermita de la Virgen de la Peña es una modesta construcción de estilo popular, presenta planta rectangular, cabecera achaflanada y nave única.

Localizada en un bello paraje natural de difícil acceso, el entorno se ha encontrado habitado desde la antigüedad, tal y como lo atestigua el hallazgo de una necrópolis de época visigoda.

Ermita de San Francisco Javier

Situada en la entrada de la localidad, se trata de una sencilla obra barroca del siglo XVIII construida en mampostería y cantería. Presenta nave única de dos tramos y bóveda de medio cañón con lunetos como cierre.

Capilla de la Virgen del Pilar

Situada sobre un portal adintelado, la capilla presenta un arco de medio punto y balconada de forja, culminada con un alero modulado, tejado a dos aguas y rematado por una pequeña espadaña.

Casa García Ferrer

Es un edificio de tres plantas entre medianerías (no aislado), de mampostería encalada y zócalo de yeso decorado. La portada principal tiene un arco de medio punto, en el cual se abrió un vano adintelado en la reforma posterior de la casa. En la parte alta hay tres grandes balcones de rejería de forja sencilla y el ático tiene tres pequeños huecos bajo el alero de madera noble, muy decorado. La composición original de la facha era totalmente simétrica aunque ha sufrido alguna transformación.

Casa Ginés Ginés

También es un edifico entre medianerías de tres plantas. La planta baja de mampostería vista con portada adintelada de sillería, pero la planta principal y el ático son de mampostería encalada. En la principal muestra dos balcones simétricos con barandilla corrida de forja, entre los que aparece un escudo. Hay dos pequeños huecos en el ático, bajo el alero de madera de doble vuelo muy decorado.

Casa Aranda Gasión

Edificio entre medianerías de mampostería encalada. En la parte baja hay una portada muy bonita con arco de medio punto; en la planta principal dos balcones con gran derrame y rejería sencilla de forja, y en el ático, dos pequeños huecos recercados en madera; sobre todo ello, sencillo alero de madera y sobreático con solana. Terminada mi visita me dirijo hacia Molinos por la carretera TE-V-8215

 

En el kilómetro 3,66 entro en El Maestrazgo turolense.

 

En el kilómetro 5,55 cruce con la carretera TE-41 que por la derecha viene de Montalbán y  la Venta de la Pintada

 

En el kilómetro 7,25 y después de un fuerte repecho llego a Molinos.

 

Lo primero que impresiona cuando llegas a Molinos es el Barranco de San Nicolás. Luego conforme vas subiendo al pueblo te va impresionando el resto. El casco urbano, la iglesia, los soportales de la plaza. Si aún no es suficiente las mágicas Grutas de Cristal terminan de dejar una profunda huella en la memoria del viajero.

 

El trazado urbano de Molinos, con una primera apariencia confusa, es un ejemplo de adaptación al terreno abrupto y consecuencia de la evolución urbana compleja, donde ahora está la ermita de la Soledad, se emplazó el castillo calatravo que contaba con una defensa adicional en la Peña del Castillo, frente a la anterior y que controlaba directamente la vega.

A partir de allí el pueblo fue creciendo y cruzando los límites de los barrancos que delimitaban la peña original, para ello fue precisa la construcción de un buen número de puentes, imprescindibles para acceder al núcleo del pueblo. Esta evolución urbana compleja ha configurado dos plazas unidas entre sí, una a partir del lateral de la iglesia, de planta cuadrada, porticada en dos de sus lados, a la que abre una arquitectura civil de gran belleza y otra que se desarrolla frente a la portada de los pies de la parroquial, junto al ayuntamiento y su torreón medieval y dos laterales porticados de una interesante arquitectura civil. En el centro de esta plaza, el mât de Molinos, compromiso entre el patrimonio del pasado y la creación artística contemporánea. La iglesia parroquial  de Nuestra Señora de las Nieves está situada en el centro de la población.

El templo data de finales del siglo XV y consta de nave única de tres tramos con capillas abiertas en el lado del Evangelio y unidas a modo de nave lateral, mientras que en el lado de la Epístola presenta una sola capilla y el acceso a la sacristía junto a la cabecera. La cabecera es poligonal y se cubre con una bóveda nervada, que en la nave se convierte en bóveda de crucería sencilla con claves talladas. El sottocoro, que aloja dos bellas pilas bautismales, se cubre, sin embargo, con una bóveda rebajada. Su interior es muy sobrio y equilibrado y la iluminación penetra a través de óculos perforados en cada uno de los tramos del muro meridional. Las dos portadas, situadas en los muros occidental y meridional, están realizadas en estilo gótico flamígero con decoración de cardinas y otros motivos vegetales y animales. La portada meridional abre a la Plaza de la Iglesia mientras que la  occidental abre a la Plaza del Ayuntamiento. Ambas plazas presentan soportales en los pisos bajos de las viviendas abiertos en arcos de medio punto y apuntados, formando un bello conjunto.

Su fábrica es de sillar y presenta potentes contrafuertes, además de un pretil en la parte superior, tal vez defensivo, ya que esta iglesia perteneció a la Orden de Calatrava. La torre de la parroquial está exenta, se sitúa a unos metros, sobre una colina cercana. Cuenta con cuatro pisos en altura, los dos primeros de planta cuadrada y realizados en mampostería con sillar en las esquinas, mientras que los dos segundos son de planta ochavada y están realizados en ladrillo. Su estado de conservación presenta graves deficiencias, a pesar de gozar de la condición de Bien de Interés Cultural, es un edificio dentro de los cánones del gótico levantino del siglo XV.

Son dignos de reseñar los museos que se encuentran en el pueblo. También es importante citar el impresionante barranco de San Nicolás que se sitúa en la entrada al pueblo y dibuja un paisaje único, combinado con algunas de sus calles empinadas debido a la superficie abrupta del lugar, hacen de este pueblo un sitio que no se puede dejar de visitar.

Existen varias zonas de especial interés en el entorno de Molinos. En primer lugar las Grutas de Cristal, que constituye el principal atractivo turístico del municipio, declaradas Monumento Natural de Aragón. También podemos destacar el Pozo del Salto, por su belleza natural y por el estado de conservación de la vegetación y las formaciones de ribera del río Guadalopillo.

Después de disfrutar de este bello lugar continúo viaje.

En el kilómetro 8,41 puente sobre el rio guadalopillo y a continuación junto a un molino conecto con la carretera que se dirige a Castellote

 

En el kilómetro 11,57 termino de subir la maldita cuesta y desciendo hacia la Val de Cascallo, llegando a un llano donde a mi derecha se encuentra la Masada del Romano

 

A continuación y después de otro pequeño repecho a mi izquierda se encuentra La Masía de la Fuente del Salz y en seguida por mi derecha me desvió hacia Cuevas de Cañart y como no da comienzo otra cuesta agotadora.

 

En el kilómetro 17,15 termino de subir ,continuando por un pequeño altiplano , desde donde veo la carretera que desciende abruptamente de nuevo sin divisar todavía Cuevas de Cañart. Mi cerebro me dice que luego eso que veo lo tendré que subir y ojalá le hubiera hecho caso. La carretera desciende por la Val de Castillo

 

En el kilómetro. 24,80 llego a Cuevas de Cañart

 

La baja densidad de recursos agrícolas y el aislamiento impuesto por las abruptas serranías que rodean Las Cuevas de Cañart, son las principales causas de que , el antaño floreciente municipio de ococientos habitantes, sea actualmente una pequeña población de menos de un centenar de personas, adscrita a Castellote. Sin embargo, éste recóndito paraje de la geografía turolense esconde un rico legado histórico. Las Cuevas estuvo ligada desde finales del siglo XII a la Encomienda templaria de Castellote, que le concederá carta de población en 1282, reservándose algunas heredades, granjas y dehesas, así como los molinos y una renta anual de 300 sueldos. Con la disolución del Temple esta aldea pasará a pertenecer a la Orden Militar Hospitalaria de San Juan, manteniendo estos vínculos hasta bien entrada la Edad Contemporánea.

El caserio se distribuye en la falda de un cerro, en cuya cima se encontraba el castillo, del que únicamente se conserva la base de una torre rectangular. Sobre él se instaló, en el siglo XVII, la Ermita de la Virgen de los Poyos, también llamada del Milagro, que posee decoración esgrafiada en su interior. Desde este punto, además de una bella vista panorámica, se divisa la cascada junto a la que se asentaba la Ermita de San Juan, en cuyas proximidades se han descubierto tumbas antropòmorfas altomedievales.

La villa está protegida por una muralla de la que seconserva el Portal de Marzo y el Arco de la Calle Mayor. De la dispersión de estos elementos se deduce la considerable extensión que debió proteger el recinto murado y la existencia de divisiones internas o fases de ampliación. En su interior se encuentra la Olaza Mayor, delimitada por edificios de notable calidad arquitectónica, como la Iglesia de San Pedro Apostol, Templo barroco de 1770, con una torre de tres cuerpos a sus pies. Cerrando todo el flanco opuesto se encuentra la Casa Arellano, en la que destaca la composición de la fachada, con vanos enmarcados con molduras neoclásicas. La vecina Casa Moliner, con su escudo nobiliario, tiene una galería de arcos, elemento muy característico en los palacios aragoneses.

En un espacio contiguo a la iglesia se asienta el ayuntamiento, en cuya plata baja hay una pequeña lonja. Entre éste y el Castillo se encuentra el Horno, obra medieval con cubierta de madera apoyada sobre seis tramos de arcos apuntados.De Camino al Convento de los Servitas se encuentra la Fuente lavadero.

Cuevas de Cañart posee importantes ejemplos de arquitectura conventual el Convento de los Padres Servitas, de notables proporciones, fue parcialmente destruido durante las Guerras Carlistas, conservándose una parte de las estructuras, entre las que destaca su fachada de 1750; disponía, según Madoz, de tres amplios claustros y capacidad para albergar a cien religiosos, estando deshabitado desde la primera mitad del siglo XIX. este convento sustituyó a otro, creado en una cueva en 1497, a hora y media de distancia del pueblo, escenario de la milagrosa salvación de un muchacho (atribuida a San Miguel Arcángel) y en la que se podía oir una misteriosa música celestial. Sufrió una primera despoblación a causa de la peste, refundándose en 1617, para ser definitivamente abandonado en 1727. En el interior de la población se encuentra el convento de las Concepcionistas Franciscanas, obra barroca del siglo XVII. Su fachada posterior dibuja una de las estampas más representativas de esta bella y desconocida población.

En el kilómetro 25,21 llego al Monasterio de los Servitas, pero está cerrado porque hay que llamar previamente a un teléfono móvil, para la visita. La culpa mía por no haberlo tenido en cuenta.

En el kilómetro 38,54 termino la subida salvaje.

 

En el kilómetro 48,99 llego a Berge atardeciendo.

 

Esta es la última ruta de este maldito año del Covi. Habiendo realizado este año un total de 260 kilómetros con esta bici.

 

Las fotografías aparecen por orden de ruta.

 

Serafín Martín.

 

Fuentes propias y:

 

http://www.berge.es/el-pueblo/galeria-de-imagenes/

 

https://es.wikipedia.org/wiki/Berge

 

https://www.turismomaestrazgo.com/molinos/