MIS RUTAS EN BICI |SERAFIN MARTIN24/02/2021 |   martingraciaserafin@gmail.com

Ruta 197 por Asturias .- De Tapia de Casariego al Cabo de San Agustín.

 

Ruta 197 por Asturias .- De Tapia de Casariego al Cabo de San Agustín.

 

El 15 de  septiembre de 2020, llevo 3.851 kilómetros.

Salgo de Tapia de Casariego por la CN-634  y sin dejar esta carretera  hasta que llego al desvío de la CÑ-4 , en dirección  a Hospital de Jarrio , desde donde continúo hacia Mohías .

En el kilómetro,18,86, entro en Mohías, este lugar asturiano, pertenece al Municipio de Coaña, y a la Comarca Parque Histórico de Navia.

Desde la carretera diviso el cementerio que habiendo pasado varias veces por aquí jamás he parado a visitarlo, a pesar de llamarme la atención su panteón neogótico. Y hoy decido visitarlo, por lo que me desvío hacia el parque de Mohías, por la margen derecha antes de llegar al acceso a las playas de Torbas y Arnelles.

Este parque  cuenta con tres  merenderos, bancos y papeleras, zona de aparcamiento y parque infantil.Pasado el parque en el kilómetro 19,60, llego a su cementerio.

El cementerio se encuentra al lado de la  iglesia parroquial de San Martín de Mohías, de estilo neogótico y construida en el año 1924.

Pero primero paro en su entrada a contemplar la capilla de Nuestra Señora del Carmen o popularmente conocida como capilla del cementerio de Mohías es la titularidad actual de la antigua capilla advocada a SanFrancisco de Borja y San Antonio de la antigua iglesia de San Martín de Mohías y que son los únicos restos conservados de este templo parroquial, derribado hacia 1921 para erigir una nueva iglesia, de mayores dimensiones.

El antiguo templo, cuyas primeras referencias arrancan desde medidos del siglo XVII, debía de ser un edificio sencillo, dotado con una nave pequeña y estrecha, con cubiertas abovedada, tribuna a los pies y un pórtico lateral con cuatro columnas de cantería, construido en 1790.

De ese primitivo templo solo se conserva esta capilla fundada en 1728 por Bernardo

Trelles, señor de la casa de este mayorazgo, cuyo escudo luce en la fachada

principal de la capilla. Está construida con los materiales autóctonos: mampostería

de pizarra irregular para las fachadas, revocada y blanqueada al exterior, con

cantería en los vanos y en la espadaña; y cubiertas de llousas de pizarra irregular,

dispuestas a doble agua sobre un armazón de madera.

No faltan los característicos gouños de la zona cuya función es la de asegurar las

llousas de la cubierta contra las inclemencias meteorológicas. Consta de una nave

cuadrangular a la que se adosa una sacristía, construida posteriormente, todo ello

precedido de un pórtico, con cuatro columnas de piedra sobre un alto muro, cubierto

con pizarra a triple agua sobre una armadura de madera interior. El pórtico está

enrejado y acaso se trate de parte del pórtico construido en 1790 que también estaba

dotado con columnas de piedra. La fachada exterior consta de una portada

adintelada, construida en 1954. Es de sobria arquitectura y remata en el escudo de

los Trelles, en alusión al patronato de la capilla, y en la consabida espadaña de un

solo hueco de medio punto y remate triangular con una cruz metálica. No faltan las

típicas pirámides populares de inspiración clasicista.

Desde la capilla me dirijo al interior del cementerio donde se encuentra el magnífico panteón neogótico de los Jardón Perissé.

 

El panteón de la familia Jardón Perissé, erigido en el cementerio de Mohías hacia

1910, es una sencilla construcción de estilo neogótico. Es de planta cuadrangular

con vanos ojivales abocinados en sus cuatro lados y contrafuertes sobre zócalos en

las custro esquinas, rematadas en arquillos ciegos de herradura apuntada y en la

fachada principal, portada apuntada con columnillas adosadas rematada por motivos

ornamentales del gusto modernista. El panteón se remata en un tambor octogonal

sobre el que se eleva un cuerpo principal escalonado. El panteón está cerrado con

una reja de escasa altura. El panteón fue erigido hacia 1910, cuando Manuela Perissé, viuda de José Jardón Trelles, y su hijo, Fernando, ampliaron el camposanto, tomando un pequeño solar para construir el panteón de la familia y otro para su cuñado Segundo Jardón Trelles.

 

Terminada mi visita al cementerio continúo por un precioso camino que se dirige directamente al Palacio de Mohías.

 

En el kilómetro 20,12, llego al Palacio de Mohías o de Santa Cruz; este palacio, con planta en forma de U, recuerda a los pazos gallegos. Está en muy buen estado. Posee torre, almenas y tres vistosos escudos. Este palacio acojió a un gran ilustrado y ministro del Rey Carlo III ;Don  Gaspar Melchor de Jovellanos, cuya habitación perdura, así como el retrato de su hermano Francisco de Paula y un buen archivo.

 

El palacio de Mohías de Santa Cruz o de los Cienfuegos-Jovellanos es una

construcción de los siglos XVI y XVIII cuya planta responde al modelo de pazo

gallego tan difundido por los concejos de La Marina Occidental Costera y que vemos

en otros ejemplos como en los palacios de Santa Cruz de Castropol o de Campos en

el concejo de Tapia de Casariego, en forma de U, formada por tres cuerpos que

forman un patio interior y una muralla que cerca toda la construcción, con una

portada con dos escudos que lucen los blasones de la familia. En la zona de

confluencia de dos de estos cuerpos se levanta una torre de planta cuadrada y de

mayor altura que el resto de la construcción y acaso el núcleo primitivo de la misma,

posiblemente del siglo XVI. El conjunto es de escasa movilidad, ofreciendo un

aspecto exterior de cubo perfecto, dominado por su tendencia a la horizontalidad, y

del que tan solo sobresale la pequeña capilla adosada al lado derecho y que a su vez

también presenta unos volúmenes muy simples. En altura presenta un único piso

sobre el semisótano, provisto de pequeñas saeteras de derrame externo.

Los vanos se disponen de forma simétrica en todo el edificio, con la carpintería

enrasada en la fachada. La cubrición es de lajas de pizarra sobre armaduras de

madera, dispuesta a cuatro aguas en la torre y a dos en los cuerpos que forman las

alas, no faltando los característicos gouños de la zona. Los materiales empleados

aparte de las pizarras de las cubiertas, son la mampostería de pizarra revocada para

los muros y los sillares bien escuadrados y proporcionados en los vanos, zócalos y

cadenetas esquineras. En general es una arquitectura sobria cuya decoración solo

se consigue por el contraste de materiales, entre la piedra y el revoque, los escudos

que flanquean la puerta principal, el alero que también tiene un carácter funcional y

las almenas que se sitúan sobre el muro que cierra el patio y la torre. Por su parte, la

capilla adosada es de pequeño tamaño y muestra una planta rectangular con una

puerta exterior sin decoración y a sus lados dos saeteras de diferentes tamaños,

colocadas de forma asimétrica. La fachada remata en la consabida espadaña y su

único elemento decorativo a parte del contraste de materiales es el escudo de armas.

En él se alojó durante algún tiempo Gaspar Melchor de Jovellanos donde aún se conserva la habitación y un destacado archivo.

En el 2000 era propietaria doña María Cienfuegos-Jovellanos Navia-Osorio. Las armas de Castrillón del escudo del palacio pueden hacer referencia a doña Ana de Castrillón, abuela de don Bernardo de Trelles, señor de la casa de Mohías en el siglo XVIII, hijo de don Vicente Anastasio Trelles y doña María de Miranda.

En la fachada principal ha dos piedras armeras.

En el de la izquierda las armas de los  Trelles: «de oro, con dos árboles de su color y entre ellos un escudete elíptico, de azur, cargado de siete estrellas de plata, dispuestas 2-3-2».

La piedra armera de la derecha con las armas de los Castrillón y Miranda. Las de Castrillón: «de plata con un castillo de piedra adiestrado de un laurel de sinople y siniestrado de dos lobos de sable, linguados de gules, puestos en palo. Todo sobre ondas de azur y plata» Armas de Miranda: «escudo colorado, con cinco doncellas desnudas hasta debajo de los pechos, sosyeniendo cada una de ellas una venera con las que se tapan el resto del cuerpo».

José María Cienfuegos-Jovellanos Cotarelo acometió la obra de jardinería en el espacio trasero del edificio así como mejoras en el palacio. En los años treinta del siglo XX se hizo el ajardinamiento por el jardinero de los Selgas, Luis Rigoreau, hijo del frances traído por Ezequiel de Selgas para la plantación y cuidados del palacio de El Pito (Cudillero) quien se enacargaría de hacerlo yaque su padre Henrí falleció en 1935.

 

Terminada mi visita y haber disfrutado de este maravilloso entorno, parto  por la Vía Fogina, en dirección a Fojops o Foxos, donde hay un mirador desde contemplo la Playa de Navia; desde este mirador parte una senda que desciende hasta dicha playa. Regreso de nuevo hacia Mohías, pero en el kilómetro 22,10 , tomo por la derecha un camino asfaltado que me lleva hasta la Rasa, entrando en ella por las escuelas, desde donde me dirjo al Faro de San Agustín.

 

En el kilómetro 23,88, llego al Cabo de San Agustín.en su entorno encontraremos: la caseta de nuevos prácticos y patrones;  la capilla del Cabo de San Agustín; el Faro moderno y actual de San Agustín, (Cerrado al público y cerrado por una valla perimetral) y el al pequeño y antiguo faro costero de San Agustín, construido en sillería., este último situado en parque público.

 

La capilla del Cabo de San Agustín fue reformada desde 1670, cuando se fundó la

cofradía de la Virgen de la Caridad, hasta el primer cuarto del siglo XX, cuando

sufrió una serie de reformas con capital indiano. Hoy día, lo que vemos es un

edificio muy singular en el panorama arquitectónico local, con pórtico lateral,

espadaña de perfiles mixtilíneos, de gusto historicista y un interior concebido como

una gran quilla de barco y llena de exvotos populares, conservando así su sabor y

carácter marinero. La capilla está construida con mampostería de pizarra irregular

para las fachadas, revocada y blanqueada al exterior, reforzada con una cantería

bien escuadrada en los vanos; y cubiertas con llousas de pizarra irregular,

reforzada con teja árabe en las cumbreras, dispuestas a doble agua, sobre un

armazón de madera. No faltan los característicos gouños de la zona. Consta de un

único volumen formado por la nave, el presbiterio y la sacristía. El pórtico lateral es

el resultado de una prolongación de la cubierta de la nave. Está estructurado por

tres columnas sobre un alto muro y cubierto con una armadura de madera.

Su aspecto exterior es el de una pequeña iglesia, huyendo del habitual modelo de

capilla popular ampliamente extendido por el concejo de Coaña (con un porche que

es el resultado de la prolongación de los muros laterales y de la cubierta) y sigue el

modelo de capilla costera ya visto en otros concejos cercanos como Valdés, El

Franco y Tapia de Casariego. La fachada es su elemento más característico y

singular, de forma semioctogonal, con una calle central ligeramente sobresaliente

en la que se abre la portada principal y sobre ella un vano de cantería. Todo ello

adintelado. Sobre el piñón se erige la espadaña de perfil cóncavo-convexo y con un

solo huego de arcos lobulados de sabor oriental, acaso fruto de la reforma de 1917

cuando la familia Jadón Perissé financió varios remodelaciones en la capilla. La

iluminación lateral la recibe a través de pequeños vanos adintelados abiertos en la

fachada principal y en el presbiterio. La decoración se reduce el contraste de

materiales (sillares, revoques, enlucidos lajas de pizarra y teja árabe) y a las bolas y

pirámides clasicistas.

En 1670, el arcediano de Ribadeo dio licencia para que los vecinos de Ortiguera fundasen una cofradía de la Virgen de La Caridad en la ermita del Cabo de San Agustín que ya existía.

En 1885, se colocó la imagen de la Inmaculada Concepción donada por José Fernández Jardón Méndez Casariego.

En 1798, se disuelve la cofradía.

En 1897, se realiza el retablo mayor.

En 1917, se financian varias obras por la familia Jardón Perissé.

Desde 1670 hasta la disolución de la cofradía en 1798 se hicieron obras de mejora.

En 1672,se revocó el interior y el exterior, se puso un campanario de cantería, un nuevo frontal del altar, pintado en 1709.

En 1735, se hace el recubrimiento de la capilla.

En 1764, se doró y pintó el retablo mayor.

1900, es de nuevo intervenida, ampliándose hacia la zona del presbiterio y la sacristía. En 1917, se reparan los entarimados y la pintura general financiado por los Jardón Perissé.

 

Tambíen hay una pequeña construcción situada casi en el pretil del acantilado ,que me llama la atención y que casi pasa desapercibida ; la caseta de nuevos prácticos y patrones.

Las garitas del Cabo de San Agustín ( solo se conserva una)  fueron proyectadas como construcciones mínimas de una superficie de 9 metros cuadrados y planta cuadrada, con materiales autóctonos (mampostería de pizarra irregular para los muros, sin enlucir, luciendo el color ferruñoso de dicho material y cubiertas de llousas del mismo material, dispuestas a cuatro aguas, sobre una armadura de madera) y soluciones formales propias de las viviendas de la zona, como algunos payares. Más que guardar relación con la tipología específica de las garitas militares reproducen a pequeña escala uno de los modelos residenciales más frecuentes en este punto de la región. Es a la vez una arquitectura lúdica o un capricho muy al uso de la burguesía americana como una respuesta o favor obtenido por Fernando Jardón de la administración, a cambio de la dotación del par de garitas de servicio. Las dos garitas, de carabineros,  la orientada hacia la entrada del puerto (no conservada) y la del práctico desde donde los prácticos del puerto de Navia facilitaban las maniobras de los mercaderes que accedían a la ría enarbolando banderas del código internacional y también con señales luminosas. Fueron construidas a expensas de Fernando Jardón, acaso sobre 1917 cuando intervinieron en la remodelación de la capilla de San Agustín.

 

El Faro de San Agustín,  se encuentra en la localidad de Ortigueira. El actual faro de Ortiguera ilumina el sector costero comprendido entre el faro de Tapia de Casariego y el de Luarca, sirviendo de gran ayuda a los pescadores de los puertos de Tapia, Viavélez (El Franco), Ortiguera y Puerto de Vega (Navia). Al no disponer de vivienda anexa para los técnicos es atendido por los torreros de Tapia.

Consta de una torre cilíndrica de veinte metros de altura de hormigón armado y 3

metros de diámetro. Se asienta sobre una base circular que hace las veces de sala

de maquinas y almacén, donde arranca la escalera interior de acceso a la linterna. Su

exterior está pintado con gruesas líneas horizontales blancas y negras de acuerdo

con el modelo estándar de nuevas tipologías de señales marítimas. La torre culmina

con dos balconcillos, uno sobre el otro, bordeados por barandilla metálica, rodeando

el segundo la linterna del faro. La linterna es de la casa Racional, con 2,25 metros de

diámetro de color gris y montantes helicoidales que soportan los correspondientes

cristales triangulares.

La cubierta de la linterna es opaca y se encuentra rematada por el conjunto de

pararrayos y veleta. Es un faro automatizado que funciona con energía eléctrica y

reserva de gas acetileno. Tiene un sistema óptico catadióptrico de cuatrocientos

milímetros de distancia focal y lámpara trifásica de mil quinientos vatios. Su

distintivo luminoso es de dos ocultaciones cada doce segundos y veinte millas de

alcance en tiempo medio. Si la lámpara principal falla entra automáticamente otra

alimentada por gas acetileno. Es un faro que no tiene aparatos sonoros ni radiofaro.

Debido a su sofisticado automatismo solo requiere la periódica atención por los

torreros de Tapia.

Junto al nuevo faro se encuentra el al pequeño y antiguo faro costero de San Agustín, construido en sillería. ,situado en parque público

La antigua torre de Ortiguera o antiguo faro constituye un elemento

arquitectónico único de las costas asturianas. Es de pequeñas dimensiones, de

solamente 5,6 m de altura sobre el terreno, construida en piedra vista y con su base

bordeada por un banco de piedra. El acceso de produce por una puerta en forma de

arco de medio punto, carece de escalera. Sobre la torre había una linterna AGA que

se encendía de forma automática con acetileno como combustible y tenía la

peculiaridad de tener una válvula solar. Su luz alcanzaba las 10 millas. Tanto la

linterna como la óptica no se conservan. Estos restos contrastan con el faro actual

cuya construcción se inició en 1973 y se inauguró dos años más tarde. La torre fue instalada en 1945 y sustituida en 1975, cuando se inauguró el nuevo faro.

 

Desde aqui decido ir a visitar el pequeño puerto de el Ribeiro, por lo que debo atravesar primero el precioso casco urbano de Ortigueira , donde a mi izquierda se encuentra la casi abandonada Villa Arbosa (casa de los Noreña). pese a su estado de semiabandono conserva todavia su belleza arquitectónica.

Villa Arbosa fue fue edificada por encargo de don José Rodríguez Jardón. Fue adquirida en 1975 por un colectivo vecinal de Noreña, «Movimiento Parroquial Juvenil» impulsado por el párroco Fermín Cristóbal, por 1.600.000 pesetas. Fue utilizada como colonia infantil estival para los noreñeses, dejando de utilizarse como albergue en la década de los ochenta.

Villa Arbosa constituye un magnífico ejemplo de la renovación arquitectónica del

concejo de Coaña que se empezó a manifestar a partir del último cuarto del siglo

XIX. Como toda la arquitectura indiana, demuestra el afán que estos personajes

tenían en manifestar su nueva posición social y económica, así como su buen éxito

en la aventura americana, con una sobrevaloración de la fachada, con una simetría

en todas sus partes que se convierte en un símbolo de estatus social, reflejo de la

modernidad, de los nuevos comportamientos sociales permitidos por una economía

capitalista donde las apariencias ya cobran importancia. Se trata de una

construcción que irradia elegancia por los cuatro costados; de nueva planta, ubicada

dentro de una amplia finca, de mampostería de pizarra irregular, revocada al exterior

y cubierta con pizarra. Es de planta cuadrangular, de líneas rectas, de dos alturas,

más un amplio bajocubierta. En el piso inferior se ubicaban los salones y

comedores, salitas de recreo, descanso, etc.; en el segundo y tercer piso la

residencia familiar y finalmente en el bajocubierta, la zona de servicio.

Pero la parte más cuidada de la casa es la fachada, simétrica y monumental, de

tres calles, destacando la central que incorpora elementos poco habituales en la

arquitectura tradicional, como la galería-mirador del segundo piso, en su día

acristalada, y que vemos en otras casas del concejo, como la rectoral de Mohías,

dispuesta sobre un porche con cuatro columnas que ennoblece la fachada y

enriquece la composición. Otro de los elementos característicos de esta arquitectura

y que hoy día la casa ha perdido es el juego de color que ofrece la aplicación de

diferentes materiales, como el revoque, la madera, el hierro y el sillar. Las escaleras

exteriores, enmarcadas por una balaustrada de piedra, de gusto modernista,

contribuyen a enriquecer el efecto teatral de la casa. También es destacable el

empilastrado de las cuatro esquinas como todo el cornisamento exterior y sobre

todo los motivos decorativos del remate (óvalos entre rocallas y tornapuntas en «S»)

de inspiración barroca que ennoblecen la construcción y refinan la arquitectura.

La parroquia de Noreña realiza labores de mantenimiento que se pueden corroborar por el estado del jardín, despejado de maleza.

La última vez que Noreña realizó algún mantenimiento en el edificio fue en 2002. En el 2003 se estaba intentado recaudar dinero para concluir unas obras de mejora que en el año 2000 se habían propuesto, obras que aún no se han producido.

Un poco más adelante a la derecha se encuentra el Palacio de Quintana Jardón construido en 1889 y en arquitectura Indiana.

La Quinta Jardón se empezó a construir en 1889 por el maestro de obras Manolo de la

Condesa. Hoy día bastante reformado, sobre todo con la incorporación de la torre, se sabe por una fotografía antigua, que era un edifico de aire colonial con una finca de exuberante vegetación, característica de los jardines de las grandes villas residenciales. Está cercado por una muralla construida con mampostería de pizarra irregular sin revocar al exterior. La planta rectangular con un pequeño balcón en el piso noble y cubierta a cuatro aguas, con cuerpo abuhardillado es muy frecuente en otros edificios del concejo y que se convirtió en uno

de los principales elementos arquitectónicos de las casas particulares desde el último cuarto del siglo XIX. Posteriormente, hasta las primeras décadas del siglo XX se hicieron remodelaciones y se añadió una torre en la fachada principal de la vivienda que a su vez sirve de recibidor y de escalinata, con terraza orientada al suroeste. Estos elementos son comunes en la arquitectura indiana, rompiendo con la horizontalidad.

La torre de la fachada consta de cuatro alturas con una distribución irregular de los vanos.

Remata en una monumental cornisa sobre el que se dispone un cierre pétreo y una cubierta piramidal de pizarra. Además, las reformas de la Quinta Jardón incluyeron la construcción de diversos pabellones para las caballerizas y cocheras, así como la configuración de un jardín magnífico, con diferentes espacios botánicos, desde la regularidad de la franja del camino hasta espacios más íntimos o personales dedicados al paseo como «el túnel del verdor» conseguido con los laureles locales. Tampoco se escatimaron gastos en la decoración interior de la vivienda, como las vidrieras obra de los Hermanos Mauméjean. En la esquina del muro de cierre se dispone una segunda torre de planta octogonal con motivos ornamentales de gusto modernista, como los vegetales y pequeñas cabezas humanas. Con todo ello, la Quinta Jardón constituye uno de los edificios más singulares del concejo de Coaña y de la arquitectura

indina en Asturias.

La financiación y promoción fue realizada por José María Jardón Trelles que nació en Ortiguera el 17 de octubre de 1844. Desarrolló importantes actividades comerciales en Argentina, principalmente vinculadas a la banca, siendo, junto a su hermano Jacinto, fundador del Banco Español del Río de la Plata, con sucursales en París y Barcelona. En 1874 se casó con Manuela Perissé Funes, bonaerense de origen francés. En 1887, la familia regresó a España, instalándose en Barcelona y Madrid, pasando los veranos en Ortiguera.

A lo largo de su historia se realizaron varias intervenciones, entre 1886 y la primera década del siglo XX, donde destaca la erección de la torre de la fachada principal.

Terminada mi visita inicio el regreso, pasando por el Cambaral, desde donde desciendo hacia Ribeiro, para visitar su pequeño puerto.

El puerto del Ribeiro en Ortiguera, en Coaña, es uno de los más espectaculares de toda Asturias, y uno de los menos conocidos del gran público. Y es que parece sacado de una película de aventuras. Estrecho y encañonado, llama la atención por su belleza natural, con su pequeño espigón, sus aguas cristalinas de fondos rocosos, y los enormes paredones de piedra, teñidos de verde vegetación, que lo hacen angosto y único.

 

El puerto de Ortiguera es tan tranquilo que solo el viento agita este lugar rodeado de casas literalmente colgadas de la montaña que parecen desafiar la ley de la gravedad. En el ascenso al pueblo, el paisaje combina casas tradicionales, algunas muy antiguas, con arquitectura indiana y contemporánea.Hasta hace pocos años no había muelle y sólo hacía las veces de éste una peña plana junto a la que atracaban las embarcaciones; pero aproximadamente entre 1918 y 1923 se pudo construir un pequeño muelle.

Terminada la visita a este coqueto puerto inicio el ascenso hasta el cambaral, para dirigirme de nuevo por la CN-4 hacia Jarrio.

 

Paso por la iglesia de San Martín de Mohías que se sitúa a mi izquierda de la marcha un poco alejada de la carretera.

Su construcción fue Financiada por los herederos de Segundo Jardón Perissé. En 1917, fue bendecida la primera piedra con asistencia de los feligreses, del párroco, de Fernando Jardón, cónsul de la República Argentina en España, el senador Fermín

Canella y el Marqués de Mohías. En 1921, se reiniciaron las obras tras un parón por falta de medios económicos gracias a las hijas de Segundo Jardón Perissé, en 1924.se inauguró y bendijo.

Su arquitectura es diáfana y luminosa, el templo de Mohías es una construcción

fuertemente iluminada gracias a los múltiples vanos ojivales abiertos entre los

contrafuertes de la nave central y por amplios rosetones abiertos en el transepto y en

el presbiterio. Finalmente, el pórtico remata en una monumental torre campanario,

con triple altura al que se accede por una única portada con una sola arquivolta

apuntada rematada en un gablete.

 

En el kilómetro 28,80, me desvio por la derecha a Medal por la FR-1, junto al hospital de Jarrio continúo por la C-Coaña-6.

 

En el kilómetro 29,50 salgo de Medal.

 

En el kilómetro 30 llego a Loza.

 

En el kilómetro 33,20 entro en Lugar Nuevo.

 

En el kilómetro 34 conecto con la CN-634

 

En el kilómetro 34,24, entro en Cartavio

 

En el kilómetro 37, conecto con la CN-634, continuando por ella.

 

En el kilómetro 39,81, me desvío por la Caridad, siguiendo hacia Porcia , desde donde de nuevo vuelvo a conectar con la CN-634, a la altura del Palacio de Campos, y sin detenerme continúo hacia Tapia.

 

En el kilómetro 51,78, llego a mi casa de Tapia.

 

En el kilómetro 51,78 , estoy de regreso en Tapia.

 

Las fotografías aparecen por orden de ruta.

 

Serafín Martín.

 

Fuentes propias y:

ftp.asturias.es › asturias › bopa

https://www.asturnatura.com/turismo/mohias/ HYPERLINK "https://www.asturnatura.com/turismo/mohias/ HYPERLINK "https://www.asturnatura.com/turismo/mohias/1922.html"1922 HYPERLINK "https://www.asturnatura.com/turismo/mohias/1922.html".html" HYPERLINK "https://www.asturnatura.com/turismo/mohias/1922.html" HYPERLINK "https://www.asturnatura.com/turismo/mohias/1922.html"1922 HYPERLINK "https://www.asturnatura.com/turismo/mohias/ HYPERLINK "https://www.asturnatura.com/turismo/mohias/1922.html"1922 HYPERLINK "https://www.asturnatura.com/turismo/mohias/1922.html".html" HYPERLINK "https://www.asturnatura.com/turismo/mohias/1922.html" HYPERLINK "https://www.asturnatura.com/turismo/mohias/1922.html".html

 

https://asturiaspordescubrir.com/articulos/dos-palacios-blanco-i/

 

LOS TRELLES DE MOHÍAS - Dialnet