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Ruta 076; por el Matarraña 3.- Ventas de Valdealgorfa,  Mas del Labrador, Valdeltormo, Calaceite, Torre del Compte.

 

El 9 de abril de 2011 llevo un total de 5584 kilómetros. El coche lo dejo aparcado una vez más en Las Ventas de Valdealgorfa, donde tomo la carretera N-420 hacia Valdeltormo.

 

En el kilómetro 1´95 paso por el Meridiano cero (Meridiano de Greenwich).

 

En el kilómetro 5´35  dejo a la derecha el desvío a Valjunquera.

 

En el kilómetro 7´43  dejo momentáneamente la carretera y tomo el desvío que se dirige Mas del Labrador, al que llego con 7´77 kilómetros.

El Mas del Labrador es un pueblo abandonado aragonés , actualmente en ruinas, situado en el término municipal de Valjunquera, en la comarca del Matarraña, provincia de Teruel. Se encuentra entre las poblaciones de Valdeltormo y Valjunquera sobre un llano entre dos valles que se unen una vez han pasado el núcleo de población.

Las primeras noticias existentes sobre el “Mas” datan de 1646, cuando la población contaba con 20 fuegos, lo que equivalía a  albergar a 90 vecinos y pertenecía administrativamente a la Vereda  d´ Alcanyís  y de 1787, en que eran 121. En 1834, la villa era un municipio independiente con ayuntamiento propio. Hacia 1915, José Pellicer, párroco de la localidad, convirtió la casa parroquial en una escuela religiosa con un internado para unos 30 alumnos.

La Guerra Civil Española castigó duramente la población. Las consecuencias de este enfrentamiento bélico fueron el intenso bombardeo y la destrucción de gran parte de las edificaciones, que ya no fueron reconstruidas debido a la emigración de buena parte de sus vecinos en los años posteriores a las poblaciones de los alrededores.

Actualmente, el único edificio que persiste en buen estado de conservación es la iglesia de San Juan Degollado (Sant Joan Degollat), construcción neoclásica del siglo XVIII de notable interés artístico, con campanario de sección cuadrangular y en cuya parte posterior se halla la sacristía y el fosar. En los últimos años se ha recuperado la tradición de organizar una romería a este templo a finales del mes de agosto, en la que participan los vecinos de las poblaciones vecinas.

La población fue abandonada definitivamente por sus últimos vecinos en la década de los años 60 del siglo XX. En concreto en el año 1962 la última familia abandonaba definitivamente Mas del Labrador

Terminada mi visita tomo equivocadamente la carretera antigua que en el kilómetro 8´46 me obliga a retroceder hasta salir de nuevo  con 9´22 kilómetros a  la N-420.

En el kilómetro 11´74 llego a Valdeltormo.

 

Valdeltormo es Lugar de la provincia de Teruel, comarca del Matarraña Situado en la depresión terciaria del Ebro, próximo al río Matarraña. a 436 metros de altitud. Su población: en 1998, era de 384 habitantes.; en 1978, 503 habitantes.; en 1950, 672 habitantes.; en 1900, 725 habitantes. Gentilicio: Valdetormenses

Antiguo Ayuntamiento. Este edificio forma parte del conjunto de ayuntamientos renacentistas que se construyeron en las poblaciones de la comarca con la llegada de la edad moderna.  Cuando se edificó, en 1584 ya estaba terminada, era la casa de la Cofradía de Nuestra Señora de la Asunción, el órgano encargado de la administración local de la población -y también de las cuestiones religiosas-, dado que Valdeltormo estaba entonces bajo los dominios de la Encomienda de Calatrava de Alcañiz y era una aldea desde finales del Siglo. XII hasta 1629 en que el rey Felipe IV le reconoció y ratificó su emancipación de Alcañiz.

Desde 1575 está documentada la organización de una asamblea general anual de la Cofradía, de la que eran socios todos los vecinos, en la lonja. Durante la asamblea se hacía una comida colectiva, se pasaban cuentas de los ingresos, gastos y bienes de la hermandad, se escogían los representantes del gobierno municipal por votación (el prior, dos mayorales y los oficiales auxiliares) y se tomaban acuerdos sobre la administración.

Como es característico de la arquitectura civil renacentista, el edificio guarda una estrecha relación entre la estética y la funcionalidad. Siguiendo el modelo general, estaba provisto de la lonja, de la prisión, de los trujales para guardar los tributos en especie y de los espacios para las funciones administrativas.

Iglesia Parroquial de Nuestra  Señora de la Asunción

Hasta principios del Siglo XV, los vecinos de Valdeltormo tenían que desplazarse hasta la población próxima a Valjunquera para recibir los oficios religiosos. Por ello, en 1407 los vecinos de la población solicitaron al Papa Luna (Benedicto XIII) tener vicario propio, alegando que disponían de iglesia con todo lo necesario, Baptisterio y cementerio. El Papa les concedió su petición aquel mismo año.

Con ele tiempo, aquel templo primitivo debió resultar insuficiente y en el siglo XVII, cuando la población tenía unos 200 habitantes, casi el doble que en el siglo XV, se decidió la construcción de este nuevo templo.

El actual edificio es una obra barroca de planta rectangular fechada en 1689. La nave principal de bóveda de medio cañón fue construida primero y a ella se añadió posteriormente en el lado de la epístola otra nave con bóveda vaída. A la izquierda de la nave central hay tres capillas laterales aprovechando el espacio entre los contrafuertes. Las naves tienen cinco tramos de los que el último corresponde a la cabecera. El templo está dedicado a Nuestra Señora de la Asunción, dado que la titular de la iglesia era la Cofradía de esta advocación. Los antiguos altares desaparecieron durante la Guerra Civil, cuando la iglesia fue utilizada como almacén de colectivización anarco sindicalista ( la villa era unja de las 18 poblaciones que formaban la Comarcal de Valderrobres) y se abrió una puerta en la pared de la Plaza mayor para la entrada de camiones, tapiada en la actualidad. En el Archivo Histórico Nacional de Madrid, sección de clero, se conserva un legajo de papeles procedentes de la iglesia de la Asunción de esta localidad turolense , con documentación de la Edad Moderna.

 

 

La Calle Mayor y La Lonja .Esta calle forma parte de la ampliación ladera abajo de la primera fortificación de la villa, la cual ya existía en 1169 cuando se produjo la conquista cristiana a los árabes. De aquella fortificación todavía se conserva el topónimo del Castillo para referirse a la zona alta de la población. En 1834, durante las guerras carlistas, se volvió a fortificar la villa como defensa frente a las tropas de los partidarios del infante Carlos.

Formando esquina con la plaza de la Iglesia y situada en los bajos del Antiguo Ayuntamiento, se encuentra la lonja. Ésta, desde su construcción en el siglo XVI, era lugar de reuniones del Concejo local, de mercado, de relaciones entre los vecinos,... Después de la Guerra Civil, se cerraron los arcos para instalar una tienda de la Cooperativa y en los años 70 pasó a ser un local cultural (el Tele-Club) hasta que fue restaurada según su estado original aunque con dimensiones más reducidas.

En el tramo occidental de la calle, destaca el pasadizo denominado “lo Cobertet” (El “Cobertet” es uno de los pasos cubiertos que se conservan en la población para comunicar las calles), y la sucesión de casas de arquitectura popular tradicional que, aunque reformadas, conservan la estructura de tres plantas propia de las zonas agrícolas: la entrada, donde estaba el corral de los animales y el pajar; el primer piso, con las estancias de vivienda propiamente dicha y, en el piso de arriba, el “carasol” o “esgorfa” para secar los productos agrícolas y otras tareas domésticas.

Fiestas: El 17 de enero son las fiestas en honor a San Antón. Durante la semana del 16 de agosto tienen lugar las fiestas mayores en honor a San Roque.

Salgo de Valdeltormo con 12´81 kilómetros.

 

En el kilómetro 15´94 paro para ver un azud en el Rio Matarraña.

 

En el kilómetro 16´39 paso por el desvío a Mazaleón e inmediatamente paso por un puente que salva el cauce del Rio Matarraña. Pasado este puente se encuentra el desvío a Torre del Compte.

 

En el kilómetro 23´18 llego a Calaceite.

Calaceite. Población perteneciente a la comarca del Matarraña, situada en el  interfluvio Algás , Matarraña en el ángulo noreste de la provincia, .a 22 kilómetros de Valderrobres, con la que comparte la capitalidad comarcal. Su caserio se encuentra a 511 metros de altitud. Su población en 1998, era de 1.232 habitantes.; en 1978, 1.512 habitantes.; en 1950, 2.099 habitantes.; en 1900, 2.641 habitantes. Gentilicio: Calaceitanos

Hay que destacar los cultivos de Melocotón de Calanda, y olivos para la elaboración de Aceite de Oliva, productos ambos que cuentan con Denominación de Origen.

Su nombre procede de la fortaleza árabe que coronó el cerro donde se asienta la localidad, Qal'at Zayd (castillo de Zayd). De esta etapa se conservan numerosos huertillos con pozo de noria y molino aceitero o los azudes del moli Nou y moli Vell.

De su casco antiguo, declarado conjunto histórico-artístico, destacan edificios particulares de estilo barroco, que lucen balcones con balaustres de piedra o de hierro forjado, y ventanales góticos y mudéjares, que crean fachadas de hermosas proporciones.

El Ayuntamiento. Este edificio es representativo de la importante eclosión de la arquitectura renacentista civil en la comarca, la cual tuvo su máximo exponente en la construcción de las casas consistoriales entre finales del siglo XVI y principios del XVII. Construida entre 1609 y 1612, la Casa Consistorial de Calaceite es una obra del maestro picapedrero Pedro Pizarro (de Alcañiz) que sigue las características generales de este movimiento que intentaba conjugar la estética arquitectónica monumental con la funcionalidad: en la planta baja se sitúa la lonja y la antigua cárcel; el primer piso es la planta noble y, por ello, está realzada con una imposta; por último, en la segunda planta se abre la típica galería con arquillos de medio punto característica de la arquitectura civil de la zona. Fue construida en el solar de una casa de propiedad municipal y de dos casas más que se adquirieron.

En el Salón de Plenos se encuentra un oratorio de 1613 con un modesto altar y un interesante crucifijo de madera del Santo Cristo, al cual se acudía en rogativa de lluvias. Actualmente, el edificio continúa albergando las dependencias municipales y conserva un importante fondo de pergaminos y otros documentos desde el s. XIII.

Antigua Cárcel de Calaceite

EMPLAZAMIENTO: Planta baja de la casa consistorial de Calaceite. Edificio magnífico, en cuya fachada principal - abierta hacia la plaza Mayor de la población se dispuso una amplia lonja, definida por arcos de medio punto. En su planta noble se abren vanos adintelados, decorados con balaustrada de piedra. En el cuerpo superior se desarrolla una galería, definida por arcos de medio punto doblados. Un alero de piedra corona su fachada principal.

CRONOLOGÍA: Esta estancia forma parte del edificio consistorial. Obra que se construyó a principios del siglo XVII: el 22 de octubre de 1606 el concejo de la villa decidió la construcción de su domus comunis y el 11 de enero de 1609 se firmó la capitulación de esta obra con Pedro Pizarro, maestro cantero alzañizano.

DESCRIPCIÓN FORMAL: En la casa consistorial calaceitana se conservan varios espacios carcelarios. Uno de ellos (objeto de nuestro estudio) se ubica en la planta baja del edificio, es de dimensiones considerables, de unos 12 metros cuadrados y a él se accede desde el patio del Ayuntamiento.

Acceso: Puerta adintelada, cerrada con robusta hoja de madera.
Vanos de iluminación: No se conserva ninguno.
Cubierta: Abovedada: bóveda de cañón, de sillería de buena factura.
Pavimento: Embaldosado moderno, originalmente debió ser de tierra.
Muros interiores: Muros de mampostería y sillería que no conservan zonas de enlucido.
GRAFFITI:  Se conservan algunas cruces sobre peanas en las jambas de la puerta de acceso y alguna otra en el muro de la izquierda, según se accede al calabozo.

MOBILIARIO:  En este espacio no conserva ningún elemento destacable.

OBSERVACIONES: En el Ayuntamiento de Calaceite se conservan, además, restos de al menos otros dos calabozos que también han sido reformados. El primero de ellos se encuentra en la planta baja, junto a la puerta de acceso al Ayuntamiento. Este espacio está comunicado con el exterior por medio de una pequeña ventana enrejada. Pudo ser la vivienda del carcelero. El segundo espacio carcelario se emplaza en la primera planta y es utilizado actualmente como archivo y almacén. Esta estancia ha sido objeto de algunas reformas importantes: superposición de un pavimento moderno y repicado de sus muros. A él se accede desde las oficinas municipales. Tiene muchas similitudes con la cárcel de la planta baja: bóveda de cañón, puerta de acceso adintelada, no tiene ningún vano de iluminación, etc. Conserva una antigua argolla en uno de sus muros y algunos "graffiti".

Calle de Maella .Aunque puede pasar desapercibida para el visitante, la calle de Maella es una de las más significativas del núcleo histórico de Calaceite. Es, de hecho, la calle más señorial, por la arquitectura de sus edificios, de todas las que forman el recorrido de las procesiones, que siguen el trazado del núcleo antiguo.

Podemos observar diferentes estilos constructivos y de decoración: interesantes balcones de forja, portales de piedra de sillería, escudos nobiliarios y, al final, la impresionante capilla de la Virgen del Pilar.

Hay referencias de esta calle en la documentación del  Siglo XVII, pero el trazado ya existía anteriormente. Hay una casa con restos góticos y, por lo tanto, anterior a dicho siglo, aunque podrían ser piezas reaprovechadas de la antigua iglesia. Muchas casas son de estilo barroco, del siglo XVIII, posiblemente porque se construirían más tarde o se reformarían en esta época.

En el s. XVII se la conoce como calle de la Justicia, probablemente porque aquí estaba la institución encargada de impartir justicia en la villa. El nombre actual es del s. XIX, aunque el portal que cierra la calle siempre se había llamado portal de Maella, ya que comunicaba con el camino hacia esta población.

Había un callejón hacia el cementerio viejo (al lado de la capilla de San Roque) denominado de Monrel o de Monreal, que se situaba seguramente donde más tarde se construyó la casa nº 8. La del nº 13 corresponde a la casa de la Abadía que tiene entrada principal por la calle de arriba.

Capilla de San Roque .La devoción a San Roque está muy extendida en la comarca y a su advocación hay dedicadas varias capillas que, en algunos casos, como este, se sitúan al lado del antiguo hospital, dado que este santo es abogado de las enfermedades infecciosas.

Esta capilla la encontramos documentada desde 1555, pero el actual edificio es una ampliación de comienzos del siglo XVII cuando se alargó la nave hacia la desaparecida Balsa Podrida (hoy un parque infantil). Las obras fueron realizadas por el maestro picapedrero de Alcañiz Pedro Pizarro quien fue también el constructor de la Casa Consistorial. Un año después de acabarla inició estas obras (el 1613) con un presupuesto de 600 libras jaquesas para la mano de obra.

Es una obra renacentista de planta rectangular construida sobre una fuerte pendiente. Tiene una sola nave de dos tramos y cubierta de medio cañón con lunetos. Muy cerca se situaba el Portal de la Fuente (derribado en 1860) y la capilla quedaba en la parte extramuros; por ello, posiblemente, dispone de pocas aperturas y tiene ventanas en forma de aspillera. En este portal, que daba al camino de Caseras, había la “taula de la Carrasca”, nombre que recibía la aduana que Calaceite tenía como pueblo de frontera con Cataluña.

Al lado de la Capilla se situaba el cementerio viejo que fue utilizado hasta 1840. Después, se construyó encima el Convento de las Monjas de la Consolación que utilizaba este edificio como capilla.

En esta capilla se han celebrado los oficios religiosos cuando la iglesia parroquial no ha estado disponible.

 

La Casa Moix, que divide la subida de les Roquetes en dos calles, destaca por la impresionante balconada sujetada con ménsulas decoradas. Este estilo constructivo en que la esquina se convierte en la fachada principal, donde se sitúa la balconada y su ménsula central, es poco habitual. Seguramente, fue por esta inusual característica, además de por su sólida construcción con grandes sillares y dinteles con decoración conopial y de otros tipos, que fue escogida para ser reproducida en el Pueblo español de Barcelona con motivo de la organización de la Exposición Universal del año 1929. Además de esta casa, también se reprodujo la casa Jassà, situada en la Plaza.

Calaceite destaca arquitectónicamente por la complejidad de su estructura urbana, con dos núcleos elevados originarios, la Torreta y el Castell, y por la abundancia de casas solariegas. A lo largo del siglo XVIII y principios del XIX hubo un período de eclosión arquitectónica en el que se construyen o se reforman muchas casas, como en este caso; esto se puede observar en las fechas inscritas en la portada de muchas casas. Esta concentración es un indicador claro de un período de prosperidad económica; seguramente motivada por el cultivo del olivo, ya que Calaceite ha sido históricamente el máximo productor de la zona, y por la coincidencia de un largo período de paz después de sufrir duros saqueos durante la revuelta catalana (1643) y en la Guerra de Sucesión (1706).

Casa Natal de Juan Cabré .Juan Cabré Aguiló nació en esta casa de Calaceite en 1882. Fue uno de los pioneros de la arqueología moderna española y también se dedicó a la pintura, al dibujo y a la fotografía, habilidades que utilizó como técnica de investigación.

Su obra científica se desarrolló en la primera mitad del s. XX. Estudió dibujo en Zaragoza -donde tomó contacto con la arqueología- y en Madrid. Su actividad comenzó cuando era estudiante. En una de sus excursiones al cerro de San Antonio (Calaceite) para pintar descubrió un poblado íbero. Muy pronto también, en 1903, descubrió las pinturas rupestres de la Roca dels Moros, en el barranco del Calapatar (Cretas) que fueron las primeras pinturas conocidas del llamado arte levantino. Estas investigaciones primeras motivaron la llegada a la comarca de algunos de los prehistoriadores europeos más importantes de la época, como Henri Breuil y Pere Bosch Gimpera. Después de una primera etapa centrada en el Matarraña y el Bajo Aragón, Cabré trabajó en muchos puntos de la Península Ibérica.

A lo largo de su vida, ocupó importantes cargos en diferentes instituciones arqueológicas y museos, dirigió 27 campañas de excavación, descubrió o estudió 72 estaciones de arte rupestre y escribió 117 publicaciones, además de memorias e inventarios museísticos. Su obra científica ha dado importantes aportaciones para el estudio de la prehistoria y la protohistoria peninsulares. Murió en Madrid en el año 1947 a los 65 años de edad.

Casa Teresa Jassà  .La ceramista y escritora Teresa Jassà Casé nació en Calaceite en 1928 en la casa Jassà, en la Plaza. Pero la Guerra Civil, que tanto influyó en su vida y en su obra, la alejó del pueblo con su familia. Teresa Jassà estudió en Zaragoza, Barcelona y Perpiñán, donde hizo Bellas Artes y comenzó su carrera como ceramista.

En 1960 se instala de nuevo en Calaceite y abre su taller en esta casa, cuyo solar había formado parte del antiguo molino de la Villa. Durante años en este taller se cocieron no solamente sus interesantes cerámicas, sino también muchas de las iniciativas culturales que se realizaban en Calaceite.

La Paz y el entendimiento entre las personas eran unas de sus obsesiones como ceramista y poeta. Así, los palomos que simbolizan la paz son una constante de sus cerámicas, entre las que destaca el “Homenaje a Goya” que rememora los horrores de la Guerra que tan genialmente representó el artista de Fuendetodos. Teresa Jassà murió en esta casa el día de Navidad de 1999.

Iglesia Parroquial de la Asunción En el siglo XVIII Calaceite tuvo un importante desarrollo arquitectónico que se inició con la construcción de la actual iglesia, una de las obras barrocas más importantes de la comarca.

Se edificó sobre los restos de la iglesia gótica de Santa María del Pla, advocación que trajeron a Calaceite los primeros pobladores cristianos. Este templo había sido construido a principios del siglo XIV y era de dimensiones más reducidas.

La construcción de un nuevo templo de grandes proporciones sobre el mismo solar provocó una reducción considerable de la plaza de “Dalt” o de Santa María, situada en el lado norte. La edificación en el siglo XIX de una casa solariega delante de la iglesia redujo también la perspectiva de observación de la fachada.

La primera piedra se colocó en el año 1695 por el Capítulo Catedralicio de Tortosa, ya que era señor jurisdiccional de Calaceite; la parroquia perteneció a la Diócesis de Tortosa hasta el año 1957 en que pasó a la de Zaragoza. El maestro de obras fue el vasco Francisco de Ibargüens y fue consagrada en 1710.

Esta construcción de sillería es de planta de salón con tres naves de la misma altura, lo cual da una sensación de gran amplitud en el interior. En el exterior destacan la torre y la fachada con tres puertas, de las que sobresale la principal a modo de retablo con las columnas salomónicas y los estípites característicos del barroco y los impresionantes clavos de forja de la puerta. La ambiciosa obra de la torre-campanario quedó inacabada en el segundo cuerpo. Durante la Guerra Civil el edificio fue quemado y quedó en muy mal estado hasta que entre 1946 y 1948 fue reconstruido. El año 2001 fue declarado Bien de Interés Cultural (B.I.C.).

 

 La Bassa .Las balsas son construcciones tradicionales que solían situarse a las afueras del pueblo y recogían las aguas de lluvia para el abastecimiento de la población.

Esta balsa destaca de entre las del resto de la comarca por sus grandes dimensiones. Recogía las aguas de lluvia procedentes del cerro de San Cristóbal a través de un largo canal.

Ha recibido varios nombres. En la documentación más antigua, la primera referencia escrita conocida es del año 1558, se la denomina la Bassa del Coll, por su situación orográfica en un cuello entre montañas, y también la Bassa Bona (Buena), en contraposición a la otra balsa de la población conocida como la Bassa Podrida porque recogía las aguas sucias de las calles. A partir del siglo XIX empieza a nombrarse simplemente como la Bassa, nombre que también recibe popularmente la plaza de la Diputación, situada al lado.

La Bassa se utilizaba para abastecer de agua a la población y a las tejerías cercanas, una de ellas ya documentada a principios del s. XVII y que ha dado nombre a la calle donde se situaba. Además, en la Bassa abrevaban el ganado y las caballerías, se criaban peces y, en época más reciente, se situó aquí uno de los dos lavaderos públicos y un abrevadero para los animales hasta la construcción de las piscinas municipales a principios de los 70 (s. XX).

En un extremo, donde en la actualidad se sitúa el polideportivo, estaba la Rebassa en la que se depositaban los residuos de la limpieza de la Bassa. Además, encima del Molí de la Vila también había otra balsa que recogía las aguas de lluvia del montículo del Castillo donde se ubicaba la parte alta de la población.

La Bassa dejó de utilizarse a mediados del siglo XX y posteriormente se construyó aquí el campo de fútbol. En la actualidad alberga el polideportivo, el edificio de las piscinas municipales y un parque infantil.

Plaza de España .Esta plaza es en la actualidad el centro neurálgico de la población, aunque no se sitúa en el núcleo más antiguo sino que forma parte del área de ampliación urbana a partir del siglo XIV.

Es el lugar de la población que ha cambiado más veces de nombre. En la documentación más antigua aparece como plaza de Baix (de abajo) en relación a la desaparecida plaza de Dalt (de arriba) donde se situaba la antigua iglesia gótica sobre la cual se construyó la actual iglesia parroquial. Durante este período, las dos plazas se comunicaban mediante dos calles, una de las cuales fue ocupada por el nuevo templo parroquial y, posteriormente, también por algunas casas. En el siglo XVII, se la denominaba plaza del Sitjar (de los silos), dado que debajo de la plaza, y con acceso desde el ayuntamiento, se situaban los silos donde se guardaban los cereales que se pagaban como tributos. Durante el siglo XIX y las primeras décadas del XX, es citada únicamente como la Plaza o la plaza Mayor. En 1931, a partir de la promulgación de la constitución republicana, se llamó la plaza de la Constitución. En 1938, con la entrada de las tropas franquistas en la población, se bautizó como plaza de España que es su nombre oficial en la actualidad, aunque popularmente se la conoce simplemente como la Plaça.

Debajo de los porches de la Plaza se realizaba el mercado: estaba la carnicería, la parada del pescado, de la cuerda,... También era el lugar de reunión de la vecindad en asamblea municipal y donde el Justicia realizaba sus juicios a la vista de todos. Más tarde y durante unos años, también se celebraban aquí las vaquillas y para cerrar la plaza se hicieron los agujeros en los pilares del cubierto. En la actualidad, aún se hace aquí el mercado, cada miércoles.

Plaza de los Artistas. Calaceite ha sido punto de encuentro de artistas, escritores e investigadores. Como antecedentes, cabe destacar los investigadores locales Juan Cabré y Santiago Vidella cuyos estudios atrajeron al Matarraña a los principales arqueólogos de principios del siglo XX, como el francés Henri Breuil o el catalán Pere Bosch Gimpera, y a los destacados filólogos Antoni M. Alcover y Francesc de B. Moll.

A partir de la década de los años 70 (Siglo XX), varios escritores y artistas han fijado en Calaceite de forma temporal o permanente su residencia, como los escritores José Donoso (Chile, 1924-1996) y Mauricio Wacquez (Chile, 1939-Calaceite, 2000) -ambos relacionados con el “boom latinoamericano”- o Ángel Crespo (Ciudad Real, 1926-Barcelona, 1996); pintores como Romà Vallès (Barcelona, 1923), Albert Ràfols Casamada (Barcelona, 1923) y Maria Girona (Barcelona, 1923); la artista local Teresa Jassà (Calaceite, 1928-1999)...

También fue importante la creación de la Fundación Noesis, la celebración del Encuentro Literario Internacional “La Nouvelle Fiction”, o la ubicación en la villa de la sede de la “Associació Cultural del Matarranya” desde 1989.

En reconocimiento a todos los artistas e intelectuales que han confluido y confluyen en esta población, se erigió esta plaza en 1999. Desde el 2002, Calaceite es la capital cultural de la comarca del Matarraña.

Portal y Capilla de la Virgen del Pilar

Los portales-capilla son uno de los elementos arquitectónicos más singulares de la comarca del Matarraña.

Este portal, situado en la entrada norte de la villa, recibía el nombre de portal de Maella porque era la puerta de entrada desde el antiguo camino de comunicación con esta población. En su construcción original era uno de los cuatro portales de la muralla que cerraba el contorno de la villa. Posteriormente, en el siglo XVIII, se construyó encima una capilla elevada de estilo barroco dedicada a la Virgen del Pilar, con la que cambió su función defensiva por otra eminentemente religiosa.

Se trata de uno de los portales más complejos arquitectónicamente de la comarca: se ubica sobre un terreno inclinado y cada fachada es diferente a las otras. Además, desde sus cuatro arcos se pueden contar hasta ocho calles. Esta confluencia de calles es resultado del relieve accidentado del casco urbano de Calaceite que parte de dos núcleos elevados y se desarrolla ladera abajo con calles que se adaptan a la orografía del terreno y que se encuentran en diagonal. La calle de Maella y la d´En Rufa serían las más antiguas y coetáneas al portal, mientras que el resto corresponden a ampliaciones urbanas posteriores.

En la actualidad, mantiene su función religiosa y sus puertas se abren durante la festividad de la Virgen del Pilar y la del Corpus.

Portal y Capilla de San Antonio

El portal de Orta, llamado así porque a él llegaba el camino de la vecina población de Horta de Sant Joan, es uno de los dos portales de la antigua muralla que aún se conservan en la actualidad de los cuatro que cerraban la villa cuando ésta estaba amurallada: el portal de Maella que también se conserva, el portal de la Balsa del Coll, el portal de la Font y éste mismo.

En el Siglo XVIII se construyó encima la Capilla de San Antonio de Padua. Esta curiosa combinación arquitectónica en la que un elemento defensivo es reciclado para un uso religioso es uno de los caracteres singulares del patrimonio monumental de la comarca.

El portal está constituido por cuatro arcos y tiene bóveda de arista. La capilla es de planta cuadrada y en su interior se conservan pinturas en las pechinas y en la cúpula de media naranja, mientras que las paredes tienen baldosas con cerámica decorada con escenas religiosas.

Las puertas centrales de la capilla se abren el día de San Antonio (el 13 de junio) y los nueve días anteriores, durante los cuales aún se conserva la tradición de rezar la novena y cantar los gozos del Santo. Además, también es tradición venir aquí a bendecir las palmas y las ramas de olivo el Domingo de Ramos.

La monumentalidad de la construcción junto con la del conjunto del casco histórico de la población ha sido merecedora de la declaración en 1974 de la villa como Bien de Interés Cultural.

Fiestas: El día 16 de enero se quema la típica hoguera de San Antonio. También son destacados sus carnavales. En las fiestas de primavera se realiza una romería a la ermita de Santa Ana. El Lunes de Pascua destaca la tradicional rosca. Las fiestas mayores, en honor a San Cristóbal, tienen lugar el 15 de agosto. Durante los días 20 y 21 de abril se celebra la feria agrícola y ganadera.

Salgo de Calaceite con 25 kilómetros regresando  a Valdeltormo.

En el kilómetro 31´25 tomo a la izquierda, el desvío a Torre del Compte, por la carretera TE-V-3001.

 

En el kilómetro 34´02 paro ante el Olmo del Molinet del Vidre. El edificio que da nombre a este importante ejemplar de olmo nos revela la importante función que desempeñó hasta mediados del Siglo XIX. La elaboración del vidrio necesitaba diversas materias primas para elaborar la pasta de vidrio: silicio, cal, o plomo, sosa, potasa y diversos minerales para proporcionar color (cobre, y hierro, fundamentalmente). Para mantener las altas temperaturas del horno (hasta 1.000º) se abastecía entre otros lugares, de la leña de los montes más cercanos. Posteriormente este molino se reconvertiría en uno de harina. Probablemente y mientras estuvo en funcionamiento, los trabajadores del mismo recibirían de este olmo una agradable sombra y cobijo durante los calurosos días de verano.

 

En el kilómetro 43´57  la carretera salva la val de Zafrán, gracias a un puente, que pasado este se inicia un fuerte descenso, hacia una val, para inmediatamente comenzar una fuerte ascensión hasta Torre del Compte.

 

En el kilómetro 44´75 llego a Torre del Compte.

Población perteneciente a la comarca del Matarraña, de cuyas capitales, Valderrobres y Calaceite la separan 22 y 21 kilómetros respectivamente. Situada en la cuenca alta del Matarraña, junto al río, al noreste de la provincia de teruel, a 497 metros de altitud. Su población en 1998, era de  179 habitantes.; en 1978, 265 habitantes., en 1950, 552 habitantes.; en 1900, 766 habitantes. Gentilicio: Torreros

Esta villa, próxima a Valderrobres, perteneció a los Oteyzas desde el siglo XIII hasta la extinción de ese señorío, en 1305. Posteriormente quedó incluida en el dominio de la mitra zaragozana.

En la localidad se cultiva Melocotón de Calanda y olivos, para la elaboración de Aceite de Oliva, productos ambos que cuentan con la Denominación de Origen.

El casco urbano se caracteriza por la presencia de las típicas fachadas añiles y conserva uno de los antiguos accesos, la puerta de San Roque, en recuerdo de la muralla que cercaba la población en el pasado. También presenta casas de tipo palaciego, de las que destacan casa Ferrer y casa Bergós.

El Ayuntamiento .Pocas veces tenemos ocasión de contemplar en el ámbito de la arquitectura una correlación tan clara entre función y forma como la que revelan los ayuntamientos del Matarraña y el Bajo Aragón.

Las casas consistoriales, que se construyen en la comarca durante la segunda mitad del siglo XVI y principios del XVII, fueron escenario de numerosas actividades de la vida colectiva. No sólo eran sede de las reuniones del concejo, sino también lugar de relaciones entre vecinos, de mercado cubierto, de esparcimiento, de cárcel.

El Ayuntamiento de Torre del Compte se finalizó en 1574, como muestra el escudo del Concejo en la fachada. Está realizado con piedra de sillería en el exterior y mampostería en el interior. Es de estilo renacentista y en él destacan dos elementos: los frontones triangulares que coronan las ventanas de la planta noble y las tres gárgolas con representaciones que conjugan elementos agresivos e intranquilizadores. Este tipo de gárgolas son una continuación de la decoración escultórica medieval que en la arquitectura renacentista de Aragón sólo se conserva en dos casos más: en el ayuntamiento de la población vecina de La Fresneda y en el de Uncastillo (Zaragoza).  

En la actualidad continúa albergando las funciones de la administración municipal. Además, se ha restaurado la antigua cárcel de su interior y en la planta superior se muestra el Centro etnológico.

 

 

 

La cárcel de Torre del Compte se construyó en la Casa Consistorial, y fue finalizada en 1574.Esta estructurada en tres espacios, intercomunicados por sencillas puertas adinteladas. El primero se utilizo como residencia del carcelero y los otros dos como calabozos, con unas dimensiones inferiores a 5 metros cuadrados.

El acceso es por un vano que utiliza como dintel una gran piedra sillar.

La primera habitación está comunicada con el exterior por medio de una pequeña ventana cuadrada, cerrada con reja.

Las tres estancias presentan cubierta abovedada muy rebajada de mampostería.

 Los muros son de mampostería, sin ningún tipo de enlucido.

Junto al vano que comunica la habitación del carcelero con el primer calabozo existe una pequeña aspillera para vigilar el interior del mismo.

Se conserva una argolla empotrada en uno de3 los ángulos del calabozo interior.

 

Casa Vergós.

A partir de la segunda mitad del siglo XVI y a lo largo de los dos siglos siguientes, la arquitectura civil de la comarca alcanzó un desarrollo importante en el que la residencia de carácter señorial ocupó un papel destacado.

En Torre del Compte, junto a la arquitectura popular abundante en edificios revocados de añil y aleros de madera, existe un nutrido grupo de casonas señoriales que enriquecen la imagen del conjunto del pueblo.

La casa Vergós es uno de los ejemplos de la arquitectura renacentista que encontramos en la población. Situada junto a la fachada de la iglesia parroquial, esta bella casa solariega se construyó en piedra de sillería y está estructurada en cuatro plantas. En la planta baja se abre una portada de medio punto con grandes dovelas. En el primer piso se sitúa la planta noble que, para remarcar su importancia, la encontramos realzada con una imposta. También se abre aquí una ventana con el dintel conopial, muy característico en la comarca, y una pequeña decoración geométrica. En el piso superior se desarrolla la característica galería de las casas palaciegas aragonesas, definida por la sucesión de vanos abiertos en arco de medio punto. Finalmente, la fachada queda coronada por una gran cornisa de piedra y en la pared lateral se conserva una gárgola con una figura zoomorfa.

Otros edificios de la población de estilo renacentista son el Ayuntamiento y la casa Ferrer o casa del Conde.

Casa Ferrer o Casa del Conde.

Fue a partir del Renacimiento, en el siglo XVI, cuando tuvo lugar la eclosión de la arquitectura civil en estos territorios. Se levantaron edificios con fachadas de sobrias portadas de medio punto, galerías de arcos también de medio punto en los áticos y un gran alero de madera o de piedra para rematar la construcción.

La casa Ferrer o casa del Conde, situada cerca del ábside del templo parroquial y fechada en el siglo XVII, es un importante ejemplo de esta arquitectura civil del renacimiento.

Se trata de un magnífico edificio de sillería cuya puerta principal está cegada. En el arco de medio punto adovelado que forma esta portada encontramos el escudo de armas de la familia. En la planta baja destacan las dos robustas rejas de forja rematadas con figuras zoomorfas. En la segunda planta se disponen tres vanos con el dintel moldurado formando un dibujo diferente en cada uno.

La actual puerta de acceso es adintelada y se abre en una tapia que da paso a un patio lateral. Sobre la tapia encontramos el mismo tipo de almenas que en el portal de les Creus

Iglesia Parroquial de San Pedro .La construcción original de esta iglesia corresponde al siglo XIV, cuando la población estaba bajo el dominio del arzobispado de Zaragoza. Alfonso II tras la conquista de este territorio a los árabes (1169) se reservó para sí esta heredad y la excluyó de la donación que hizo de los dominios de Valderrobres al arzobispo de Zaragoza, aunque el rey Jaime II renunció a ello en 1307 y la población pasó a manos del arzobispado.

Es un templo construido en piedra de sillería de tres naves, de las cuales la central, junto con la portada, corresponde a la iglesia original, de estilo gótico. Esta nave tiene cubierta de crucería, está dividida en tres tramos separados por arcos apuntados y se prolonga en el ábside que era pentagonal. En las claves y capiteles se encuentra la mayor parte de la decoración gótica escultórica: motivos vegetales, heráldicos, fauna y escenas religiosas.

Las obras quedaron paralizadas y se reemprendieron en 1354 cuando el arzobispo de Zaragoza ordenó que se pagaran de los fondos de las primicias durante diez años y encargó esta fase de la obra al maestro cantero de La Fresneda Martín Moix con la obligación de terminarla en tres años.

En el siglo XVIII, muy probablemente, se realizaron las obras de ampliación del templo en estilo barroco: se construyeron dos naves laterales, la sacristía, un coro alto a los pies y el campanario. Esta torre campanario es el elemento más destacado en la silueta de la población; dispone de cuatro cuerpos y está rematada por un chapitel piramidal coronado por una cruz-veleta de forja. Con la construcción de las naves laterales, el ábside se redujo a tres lados y las ventanas góticas de estos lados quedaron cortadas.

Portal de les Creus.  

Uno de los aspectos más destacados del patrimonio comarcal es la gran cantidad de poblaciones que estuvieron amuralladas. Aunque en la actualidad sólo se conservan restos de aquellas murallas, su papel en la configuración de la estructura urbana ha sido muy importante.

Una muestra importante de los restos de las murallas son los portales, como este llamado de “les Creus” (las cruces) situado en el extremo sur de la población. Constituye la única puerta de la antigua muralla de Torre del Compte que se conserva en pie, de las seis que debió tener esta villa. De los otros portales, se conservan restos del llamado “del Roig” o de la Bassa, que fue derribado en los años 70 (S. XX) para facilitar el acceso rodado a la población y algunas piezas se reutilizaron como elementos decorativos del jardín de enfrente.

Desde este portal parten intramuros, bifurcándose, la calle de San Roque, recoleta y quebrada, con un hondo sabor popular; y la calle Baja, que penetra en el conjunto de la villa bajo pasadizos de gran interés arquitectónico.

El portal está realizado con un arco de medio punto con grandes dovelas que se abre en el lienzo de la muralla construida en mampostería y rematada aquí con siete almenas, con el escudo de la villa en una de ellas. 

Desde esta entrada a la antigua muralla podemos observar una espléndida vista de la población y del paisaje que la rodea.

Fiestas: El día 17 de enero se celebra San Antón, con los "diablets". Del 24 al 29 de junio son las fiestas patronales de San Juan y San Pedro. Las fiestas en honor a San Ramón tienen lugar los días 31 de agosto y 1 de septiembre.

Salgo de Torre del compte con 45´97 kilómetros..

 

En el kilómetro 47 cruzo el Río Matarraña.

 

En el kilómetro 49´33 llego al cruce de carretera A-231, justo enfrente de este cruce se encuentra la entrada a  La Fresneda.

 

En el kilómetro 55´50, paso por Valjunquera.

 

En el kilómetro 59´60 salgo a la carretera N-232.

 

En el kilómetro 60´61 llego a Las Ventas de Valdealgorfa.

 

Las fotografías aparecen por orden de ruta.

 

Serafín Martín.

 

Fuentes propias y más información en:

 

Enciclópediaaragonesa.com

Colección Rutas CAI - Nº 2 El Matarraña y los Puertos de Beceite Edita CAI – PRAMES.

Colección Rutas CAI - Nº 16 Caspe, el Mar de Aragón y el Bajo Matarraña Edita CAI – PRAMES.

http://es.wikipedia.org/wiki/Mas_del_Labrador

http://www.portalmatarranya.es/

 

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